Introducción al Curso: El método ED

Es sabido que la producción es uno de los oficios más estresantes que existen en todo el mundo, y solo está por debajo del stress que día a día puede sobrellevar el personal militar, los policías, los bomberos o los pilotos de avión, quienes deben tomar decisiones altamente complejas en fracciones de segundos.

En 2008 cuando comencé a dar mis primeros pasos en producción, atravesé momentos de mucha ansiedad, porque necesitaba resolver un sin número de variables, las cuales no dependían en su mayoría de mi, sino que de los distintos proveedores de productos y servicios, los cuales también dependían de terceros para lograr entregar en tiempo y forma según lo planificado. Recuerdo que fue un periodo de mucho sufrimiento, por el hecho de no tener control sobre los acontecimientos que podrían suceder, la presión me empezó a generar un stress generalizado, tanto a nivel corporal como mental…incluso a veces no podía dormir, durante algunos días previos a los eventos esta incertidumbre me llevó a tener sueños con los mismos sucesos que podrían ocurrir. Recuerdo incluso haber dejado una libreta en el velador mucho tiempo, con un lápiz, y en el caso de despertar atormentado, podía anotar la visión del recuerdo y no olvidarlo. 

El tiempo pasaba y este problema seguía sin solución. Era siempre lo mismo, al no controlar las variables y no tener conocimiento acabado de cada uno de los acontecimientos o necesidades particulares comenzaba mi sufrimiento y en la búsqueda de detenerlo, de forma obstinada un día hice un ejercicio muy básico, tomé un cuaderno y separé por ítem todas las cosas que no dependían de mí, luego recorrí el evento mentalmente, me puse en el caso que eso fallara. De esta forma logré determinar realmente la importancia de cada ítem, y los ordené de forma crítica por su relevancia. Todas aquellas cosas que al fallar generaban una consecuencia mayor, las dejé como prioridad para analizar.

Pronto pude determinar que teniendo estos puntos claros, es más simple preparar un plan "B" o de contención. Y fue así que por fin pude comenzar a visualizar mejor poco a poco los eventos, tanto así que comencé a centrarme en los detalles más específicos y generar una mejoría importante en los resultados. Dentro de mi perspectiva durante el transcurso de los años, he determinado que existen tres niveles que se pueden desarrollar y atravesar en producción:

El primero es cuando como productor alcanzas justo a llevar a cabo el evento, sin que te sobre nada. A veces tienes fallas que generan un inconveniente, otras veces por consecuencia del mismo destino el evento fluye bien y no pasa nada. Pero de todas formas el cliente probablemente no llama o textea para felicitar al equipo, porque simplemente es un evento más, intrascendente... El segundo nivel son quienes ejecutan eventos de forma más regular con una tasa de fallos aceptable en el tiempo, todos los ítems de la propuesta están plasmados y el cliente puede llegar a reconocer el esfuerzo y entrega. Por último, en el tercer nivel están los que llegan casi siempre con todo, pero además, han alcanzado a mirar y profundizar al máximo en los detalles para mejorar la experiencia. Son quienes logran un entendimiento acabado de cada punto, y han recorrido de principio a fin las variables, dejando respaldados los puntos críticos con un plan de contingencia, pero que adicionalmente ya que dominan el oficio, les queda tiempo para buscar ese detalle y puntada final. En este nivel los clientes se pueden transformar en clientes leales, fidelizados por tu capacidad. Es cuando traspasan confianza a ti, y comienzan a dejar que les recomiendes y tomes la gran mayoría de las decisiones. 

Para llegar a este nivel, es necesario comprender y manejar algunas herramientas de gestión que gracias al aporte de todos quienes han estado estos años a mi alrededor, pudimos desarrollar en conjunto y perfeccionar midiendo y ajustando sus impactos, sacando lo mejor de cada experiencia vivida. Es al día de hoy una mezcla de estas herramientas, la forma en que veo las cosas y mi personalidad, que al juntarse pasan a ser mi método de trabajo único y personal, que está soportado en una serie de documentos prácticos, los que utilizados de la forma en que te enseñaré, te permitirán lograr tus objetivos, a tu manera, bajo tu propio criterio y por su puesto bajo tu propio control.

Yo de antemano me comprometo a poner todo de mi parte para que esto resulte, pero también necesito que tú seas el que de un primer paso y te anticipes con una actitud positiva. Es posible que muchos de ustedes hayan tenido experiencias previas gestionando proyectos, pero para que esto funcione deberás dejarlas de lado y partir de cero. Este método, es mí método y la forma en que yo veo la gestión de los proyectos publicitarios, pero al mismo tiempo es el que he venido optimizando con la experiencia recogida en cada una de las producciones, a veces con equipos de trabajo a cargo, por lo que no es solamente mi forma de hacer las cosas, es la forma en la que a través de los años hemos podido sacar adelante los desafíos que se nos han presentado como equipo, en los diversos escenarios que estuve presente y tuve la suerte de estar. Es una metodología que fui ajustando en la marcha, y al día de hoy probada.

Al concluir el curso te podrás unir al Telegram, donde compartimos datos, formas e ideas de cómo avanzar en los desafíos que se nos van presentando día a día. Toma nota de todo lo que sea relevante, y si es necesario vuelve a ver cada clase. No debes avanzar sin entender el contenido, ya que en función del progreso te será necesario ir aplicando los conceptos para comprender y trabajar en lo que sigue.

Por último, si pudiste imaginar, el nivel más alto de la producción no está exento de complicaciones, es normal siempre que algo falle o no salga como esperábamos, acá no existe la perfección. Para esto nuestros planes de contingencia deben estar preparados, pero aún así es posible que existan nuevos imprevistos impensados, los cuales te harán entender lo demandante que este oficio es. Lo importante es que siempre puedes superarlos, ya que en estos momentos es cuando descubres que tan capaz puedes llegar a ser.

Ser productor, no es sólo gestionar los eventos de forma eficiente, también es entender que estamos para solucionar los problemas, y mientras más problemas podamos desarticular, más importante y de mayor valor percibido serás a ojos de tus clientes con el paso del tiempo.